Es increíble pensar que la sociedad moderna se ha vuelto dependiente a la conexión de Internet, en los últimos 5 años se han vendido más smartphones, tablets, IPad y dispositivos móviles, que televisores, ordenadores de escritorio o laptops, productos que anteriormente llevaban la batuta en ventas del sector tecnológico.
Considerando tal afirmación, nos damos cuenta que nos hemos convertido en consumidores dependientes de internet, de hecho, muchas personas son adictas a las redes sociales y en realidad se han convertido en personas cerradas, apáticas y con problemas, pero eso ya es otro tema digno de otras especialidades.
En cierto modo Internet ha traído cosas muy buenas, sobre todo cuando hablamos de la accesibilidad en dispositivos móviles, hoy en día podemos ahorrar mucho tiempo sólo utilizando nuestro teléfono, desde hacer la compra de la semana, realizar operaciones bancarias, mantenernos en contacto con nuestros familiares y amigos, e incluso establecer una reunión de trabajo.
En ese sentido, no podemos negar que nos encanta conectarnos a una red wifi gratis para darle un respiro a nuestro plan de datos móviles, nada más leer o escuchar “red wifi abierta” nos olvidamos de todo y establecemos la conexión, se preguntarán ¿qué tiene de malo?, pues, así como el wifi nos permite una conexión gratuita, también tiene sus puntos malos que debemos considerar, sobre todo si se trata de una red abierta al público.
Como su nombre lo dice, una red abierta está disponible para todo el mundo, es decir, cualquier usuario puede ingresar a la misma conexión, ¿qué propicia eso? la ciberdelincuencia, para un hacker una red abierta significa la posibilidad de robar datos personales de otras personas y luego utilizarlos para su beneficio personal.
¿No te queda claro?, muy bien, para que se entienda el peligro de una red wifi abierta es necesario recalcar como funciona una red wifi abierta; la red wifi es en realidad una única red que comparten una diversidad de usuarios, es decir, que toda la información de cuentas de redes sociales, historial de búsqueda, contraseñas de seguridad y otros datos personales, pasan por o, incluso se almacenan en la memoria o Big Data, de esa red, en ese sentido, una persona con los conocimientos necesarios, puede ingresar a las entrañas de la red, tomar los datos específicos de una persona y posteriormente hackear su información.
Probablemente has sido víctima de un hacker o conoces a alguien que ha pasado por eso, no te sorprendas que la razón fue exponer sus datos en una red pública, no es lo mismo que una red privada donde para acceder a la información existe una primera barrera de entrada, el conocer la contraseña de la misma.
Es importante entender los riesgos del wifi abierto, imagínate que hagas alguna de las actuaciones que hemos mencionado al principio del post, donde manejas no solo información de redes sociales sino datos bancarios o cuentas de PayPal y similares, podrías sorprenderte un día y descubrir que no tienes saldo.
De hecho, los riesgos de robos cibernéticos no son la única razón por la que debes preocuparte al conectarte a una red abierta, muchas veces expones tu dispositivo a ser infectado por malwares que controlan publicaciones en tus redes sociales o dañan el contenido de aplicaciones.
¿Quieres saber cómo cuidarte?, la primera norma es evitar entrar en redes abiertas, pero de ser necesario puedes primero consultar con el dueño del establecimiento que ofrece el wifi gratuito, si esa red les pertenece, muchos hackers crean redes falsas como trampa para pescar la información, de ser posible evita entrar en tus perfiles sociales y sobre todo en cuentas bancarias, mantén tu navegación en sitios web que comiencen con “https” son sitios seguros que encriptan la información e intenta no usar aplicaciones que se conecten a internet si estas no usan protocolos de encriptación por defecto (por ejemplo; la aplicación de Telegram sí los usa, la aplicación de Facebook no).
No tratamos de decir que todo el mundo que se conecta a una red abierta va a ser víctima de la ciberdelincuencia, pero sí que existen las posibilidades, y como dice el refrán “más vale prevenir que lamentar”
Nos gustaría destacar igualmente que el riesgo es latente en cualquier tipo de conexión, pero obviamente tratándose de una red abierta, las probabilidades aumentan, sin embargo, como consejo adicional, nunca viene mal cambiar regularmente las contraseñas de tus perfiles sociales y demás plataformas y además limpies constantemente los datos de tu dispositivo móvil y ordenador, eliminar las cookies y borrar el historial. Recuerda siempre tomar medidas de seguridad y nunca pensar que no te va a pasar nada.